
Me he presentado a un concurso con éste cuadro. Me ha
costado mucho trabajo decidirme, porque no soy nada
competitivo. Tal vez sea porque, en la vida, en general,
no me ha ido demasiado bien, y frecuentemente, mi mie-
do al fracaso, me invita a renunciar a la lucha. Pero me
he sobrepuesto, y me he dicho: Si el cuadro es bueno,
es imposible un fracaso total. Mi esfuerzo, mi lucha, es
conseguir un buen cuadro. Lo demás, vendrá por aña-
didura.